TIEMPOS DE LIBERTAD
Por Denis Márquez
Secretario de Organización
Partido Independentista Puertorriqueño
Publicado en Periódico Metro 10 de julio de 2015
Somos una colonia del gobierno de los Estados Unidos y su Congreso continua teniendo "poderes plenarios sobre la isla". La reafirmación más reciente de esta realidad -sobre la que el gobierno de Puerto Rico y su partido sigue acomodaticiamente ambivalente - fue la decisión del Tribunal de Circuito de Boston al confirmar la decisión del Tribunal Federal en Puerto Rico de que la llamada Ley de la "quiebra criolla" es inconstitucional. El fundamento principal que utilizó la mayoría de aquel Tribunal al ratificar esa decisión fue, precisamente, que los poderes del Congreso de Estados Unidos sobre Puerto Rico son plenarios pues la cláusula de la constitución americana sobre la uniformidad de la Ley de Quiebras en su estados es inaplicable a la colonia. En otras palabras, es inevitable concluir que "el ELA vale tan poco y tan poco que no sirve ni para declararse en quiebra", como expresara la Senadora María de Lourdes Santiago.
Anteriores decisiones del Circuito de Boston relacionadas con la situación política de Puerto Rico fueron utilizadas durante décadas por el liderato del Partido Popular para sostener ante el país la continua fantasía de la existencia de un pacto. Sin embargo, siguen aumentando los foros e instancias que reafirman, reconocen y diseminan la realidad colonial de Puerto Rico. Cada vez se divulga con mayor fuerza y se escucha con mayor receptividad.
Las diversas ramas del gobierno estadounidense comienzan a desquebrajar la colonia y su teoría del pacto. Desde el propio Congreso de los Estados Unidos nos llegan los "fogonazos". Anuncian los congresistas -los que ponen en función los poderes plenarios- que el proyecto para incluir a Puerto Rico en la Ley de Quiebras Federal está a punto de fallecer porque no existen los votos para su aprobación. En ámbitos internacionales Latinoamérica y las Naciones Unidas condenan el colonialismo y promueven la descolonización porque existe la conciencia profunda de la importancia que tiene la independencia de los países para poder ejercer la interdependencia económica con nuestra región y con el resto del mundo.
El 2012 en Puerto Rico rechazamos la colonia en las urnas. Este cuatrienio ha sido aún más evidente su bancarrota fiscal y gubernamental. El gobierno y el Partido Popular siguen dándole la espalda a esta realidad. Hablan de consensos y de búsqueda de alternativas, pero mientras las propuestas no reconozcan la estrecha relación entre el problema económico y la situación colonial estarán dirigidos al profundo fracaso tal y como han sido sus intentos de legislación con relación a la quiebra, localmente y en Estados Unidos. Los mecanismos colonialistas, las vías recorridas para "atender" la grave crisis fiscal se siguen cerrando. Mientras, el ELA colonial languidece ante la apabullante realidad económica y social que deja como legado.
Ayer conmemoramos el natalicio del fundador del Partido Independentista Puertorriqueño, Dr. Gilberto Concepcion de Gracia, mediante diversas actividades: una ofrenda floral en el cementerio del Viejo San Juan; una actividad política en su pueblo natal, Vega Alta; en la noche asistimos a la otorgación por el Colegio de Abogados de la Medalla que lleva su nombre y que este año reconoce por mérito propio y póstumamente las aportaciones y la figura de su hijo, el Lcdo. Gilberto Concepcion Suarez. Su padre don Gilberto expresó: "La independencia es la solución natural al problema del 'status' de Puerto Rico y su pronto reconocimiento por parte de los Estados Unidos, una necesidad." Son tiempos de reafirmar nuestros legados no tan solo de dignidad y valentía, sino de coherencia hacia el bienestar común. Son tiempos de descolonización. Son tiempos de libertad.